La llegada del buen tiempo siempre implica cambios y, como cada primavera, las sandalias exige una puesta a puento de tus pies. Y es que todo el invierno escondidos y olvidados de ciertas rutinas, hace que cuando te pases a las sandalias tu pies no estén nada bonitos.
Pero todavía estás a tiempo de superar, con buena nota, el cambio a las sandalias.
Te contamos las claves para lucir unos pies bonitos y cuidados.
Hazte la depicura!
Es un auténtico tratamiento de belleza que aportarán hidratación y belleza a tus pies. Y trata de repítelo cada 3-5 semanas:
- Un baño caliente para tus pies. Añade al agua caliente un poco de tu gel favorito y unas gotas de aceite de almendra o cualquier loción hidratante que tengas a mano.
- Termina el baño con un buen chorro de agua fría. Con ello activarás la circulación.
- Exfolia tu pies. Puedes hazte la crema exfoliante mezclando yogur con azúcar en igual proporción. Además de preparar tu piel, la exfoliación te aportará un agradable masaje por la planta de los pies. Insiste en los nudillos y en los talones.
- Mima tu uñas. Córtalas rectas y lima los laterales.
- Elimina las durezas. Con una lima especial.
- Aplica generosamente una crema hidratante con un masaje.
Los colores de este verano para las uñas de los pies, además de la clásica francesita, son los plateados o dorados, por toda la uña o con manicura francesa, así como colores rojos. Un truco importante es combinar el tono de las uñas de las manos.
¿Talones agrietados?
Si tienes talones resecos, sumérgelos en agua caliente durante unos 20 minutos, sécalos y frota con una piedra pómez. Luego, aplícate una loción muy hidratante.
Repite este tratamiento 2 ó 3 veces por semana.