Alimentos y estado de ánimo

Estar en forma significa mantener un estado de salud óptimo, que se traduce en mantenerte en tu peso, no agotarte con la realización del mínimo ejercicio físico, y sentirte a gusto contigo misma.

¿Estás en forma? Si resoplas al subir las escaleras para un segundo piso o crees que el deporte es lo más aburrido que hay, probablemente no lo estés. Y aunque parezca una tontería, la realización de ejercicio físico diario no es solo cuestión de conseguir un cuerpo bonito, si no sobre todo de mantenerse sana y aumentar la protección contra diversas enfermedades físicas y mentales.

Ponerse en forma es algo que siempre da pereza a priori, pero una vez que se comienza no da más que satisfacciones. Lo más importante es conseguir introducir en las rutinas diarias hábitos activos, de una forma sencilla y agradable. Estar en forma no es una obligación…¡es un placer!

¿Quieres saber qué hábitos te ayudarán a estar en forma?

  • Bájate del autobus un par de paradas antes de llegar a casa y haz el resto del camino andando. Si no estás muy lejos, mejor aún si haces todo el camino andando.
  • De la misma manera, si vas en coche al trabajo, apárcalo un poco más lejos. Esos 10 minutos de ejercico físico te pueden parecer una mingurria, pero son mejor que nada y se van sumando en tu cómputo general de actividad ;).
  • No uses el ascensor. Si vives en un piso alto, haz parte del trayecto andando.
  • Considera la idea de comprar algún aparato para hacer ejercicio en casa (la elíptica, una bici estática). Una vez que lo tengas, úsalo. Puedes aprovechar el tiempo de ver la tele para hacer ejercicio mientras. ¡Muy práctico!
  • Trata de encontrar un deporte que te guste. Tiene que haber algo que te atraiga en el mundo deportivo…deja la pereza al lado y pruébalo. Un curso de vela, de tenis o un partido de fútbol con amigos, lo importante es que te estimule.
  • Haz deporte en compañía. Si acudes al gimnasio con tu hermana, tu novio o una amiga, te lo pasarás mejor y te sentirás más presionada para ir.
  • Utiliza la hora de comer para hacer ejercicio. Puedes tomar un tentempié rápido y después irte a dar un paseo, mucho mejor si convences a algún compañero de trabajo para hacerlo contigo ;).
  • Busca actividades de ocio activas. Combina las charlas en una cafetería con charlas en medio de un paseo por el monte y las sesiones de cine con sesiones de baile.
  • Planifica tu horario deportivo. Si apuntas en tu agenda «de cinco a seis spinning», inconscientemente lo verás como algo que «tienes que hacer».
  • Si empiezas en el gimnasio, busca un entrenador personal para los primeros días. Te dirá cómo y qué te conviene hacer, y te sentirás más segura sobre tus ejercicios posteriormente, cuando acudas sola al gimnasio.

¿Y tú? ¿Estás en forma? ¿Cómo lo haces?

Vía: The nutrition source