«El mundo de la moda está ahora echado a perder. Me aburre bastante seguir en un mundo que no me dice nada. Hay poca creatividad y demasiado negocio. Los jóvenes están haciendo las mismas cosas«. Así de rotundo se mostró Valentino en a preparación de su último desfile en París que se celebrará en pocos dias.
Valentino, cuya casa de moda ha sido adquirida por la firma privada de inversión Permira, está considerado junto a Giorgio Armani y Karl Lagerfeld como los últimos grandes diseñadores de una época anterior a la globalización de la moda y a la muy alta comercialización de la industria dirigida por contables y ejecutivos de marketing.
El diseñador, cuyos vestidos de noche y estilo conservador lo convirtieron en uno de los favoritos de los eventos de alfombra roja, dijo que se arrepentía de haber creado un sucesor. La antigua diseñadora de Gucci Alessandra Facchinetti sigue sus pasos.
«No nos hemos visto. La di algunos consejos, es cuestión suya encontrar su camino», dijo Valentino. «Me arrepiento de no haber tenido tiempo ni ganas para crear un heredero».
Valentino tiene muchos proyectos, como una película sobre sí mismo. Para su último desfile del miércoles, Valentino dijo que vendría su equipo desde Roma y también estarían las actrices Gwyneth Paltrow, Uma Thurman y Liz Hurley. Las supermodelos Claudia Schiffer, Eva Herzigova también estarán sentadas entre el público.
«Hice esta colección con mucha alegría», dijo Valentino a Il Messaggero. «Pusé 45 años de experiencia en la ropa. Quiero enseñar qué es realmente la alta costura. Muchos lo hacen, pocos son los que saben hacerlo. Muchos deberían intentarlo de nuevo».